El descanso activo es aquel periodo en el que descansas de tu ejercicio habitual pero sigues entrenando, es decir, realizas una actividad con una intensidad, frecuencia y esfuerzo menor que la habitual.
¿Qué hacer el día de descanso activo?
Una buena forma de descanso activo sería reducir los pesos que levantas a la mitad, hacer menos volumen de ejercicios (incluso entrenar menos días esa semana) y disminuir el ejercicio cardiovascular (pongamos 25 minutos en vez de 45).